Me pase tanto tiempo tratando de hablarle que se me pasaron dos meses volando.
Queriendo hablarle se te pasaron noches y madrugadas.
Nunca le hable. Pase dos meses pensando y no concretando, sin hablarle.
¿Por qué no lo hiciste?
No se. Miedo tal vez.
¿Miedo al rechazo?
No, ya lo hizo alguna vez y acá estoy.
¿Miedo a qué? ¿A molestar?
Puede ser.
Nunca te dijo que no le hables.
Me corto al restro varias veces.
Es verdad, ¿Entonces?.
No lo se, tal vez tenga miedo a lo que se venga.. Porque vos y yo sabemos que cada vez que hablamos me da vuelta los textos.
Pero a vos te gusta que tus textos esten de cabeza. No me lo nigues.
Puedo decirte que me agrada durante un tiempo pero cuando quiero leer se me dificulta, vos sabes como es esto.
Dale salida, eliminalo de los borradores.
Deberia. Es muy buen consejo... El problema es que no quiero, me gusta saber que esta ahi.
Entonces hablale y vamos a ver qué pasa. El que no arriesga no sabe si pierde.
Tenes razón... Espero que no vuelva a suceder...

El que no arriesga no gana.

Las grandes desiciones se toman en tiempos dificiles, no? Cuando ya el fracaso es continuo, cuando se vuelve una deuda personal; ya no importa nada de lo que me puedan decir los demas. Cuando estas cansado de ver siempre lo mismo, de viajar en el mismo colectivo, de tener siempre las mismas sensaciones. Cuando no se puede detener la caida y lo unico que queda es poner las manos para amortizarla.. Es ahi cuando llega, cuando surge ese interrogante: ¿QUE HAGO CON MI VIDA?. Hay que parar. Ese es el momento para elegir, tratar de no cometer errores pensado estrategicamente en lo que puede o va a pasar si elegimos tal o cual opción. Animarse a dar un paso para obtener eso tan deseado, eso que nos llenara de alegria y nos inflara el pecho de orgullo cuando lo obtengamos.. Que no haya desilución, que no caigamos de nuevo. Hay que dar el GRAN paso.